Una gran huella de amor
Sin duda fue una noticia triste para la comunidad educativa del Liceo Sagrados Corazones, enterarse de la Pascua de la Hna. Ana Cecilia Muñoz López, quien fue directora del colegio en la década de los 90 y que falleció el domingo en la ciudad de Viña del Mar, producto de una larga enfermedad.
La “madre Ana Cecilia” como cariñosamente la llamaban fue la principal gestora en la compra del terreno donde se emplaza actualmente el colegio. Sin embargo, su especial carisma y personalidad es el recuerdo que acompaña a quienes la conocieron. Siempre alegre y optimista, moderna para su época, de personalidad fuerte, pero con una sonrisa a flor de piel, carismática, trabajadora y atenta. Acompañó pastoralmente a quienes lo necesitaban y siempre tendió una mano cuando alguien requería de su ayuda. Estas características fueron el reflejó en estos días de despedida, donde los mensajes de gratitud no tardaron en llegar.
A lo largo de su vida religiosa sirvió en todos los colegios y centros educativos de la congregación. Fue además formadora en Brasil y se desempeñó al menos por dos décadas en cargos en la provincia, periodo en el cual también tuvo el rol de Superiora Provincial.
Este martes, se llevó a cabo la eucaristía en su memoria en la parroquia de Viña del Mar, presidida por el Pbro. Guillermo Rosas de la Congregación de los SS.CC, quien recordó con cariño a la religiosa: “Si hay algo que nosotros, todos los cristianos, pero muy especialmente los religiosos y religiosas anhelamos cuando recibimos el llamado del Señor es justamente ese: es que haya una tierra nueva. Toda nuestra vida, mal o bien, con más o menos fragilidad, es justamente tratar de hacer que la tierra sea un poco mejor, que la humanidad sea un poco mejor, poner un granito de arena para que esto suceda. El bien que una persona hace no se puede medir con los parámetros de esta época. Nosotros creemos que Dios a través de toda persona hace una tarea oculta, misteriosa. Como una huella, un hálito de Dios que queda flotando en los lugares en los que Ana Cecilia estuvo…”.
La ceremonia de sepultación se realizó en el cementerio de Playa Ancha en el mausoleo de las hermanas.